La plaga de cucarachas alemanas (o blattela germánica) es una de las más extendidas a nivel mundial. Estos insectos miden entre 1 y 1,5 cm y son de color pardo amarillento o marrón rojizo. ¿Quieres saber qué hacer para no encontrártelas más en casa o en el lugar de trabajo? En este artículo te explicamos cómo abordar una infestación de manera efectiva.
Hábitos y hábitats de la cucaracha alemana
Las cucarachas alemanas pueden verse en viviendas, aunque también son comunes en empresas donde se manipulan alimentos, como restaurantes, bares y hoteles. Los edificios con calefacción central están entre sus hábitats preferidos, especialmente si hay cocinas, despensas y cuartos de baño cerca.
Esta especie se esconde durante el día y espera a la noche para buscar comida. Su erradicación es complicada, por la rapidez con la que se reproduce. La dificultad se incrementa al recurrir a trucos caseros o a productos que no solucionan el problema de raíz. De hecho, a menudo lo empeoran. Por eso, lo mejor es que te lo tomes en serio desde el principio y contactes con un profesional. Veamos por qué.
Las cucarachas son un riesgo para nuestra salud
Vivir entre cucarachas es un riesgo para nuestra salud y para la de nuestros clientes. Por eso es importante mantenerlas lejos de nosotros. Pueden llegar a transmitir enfermedades como la disentería, la gastroenteritis, la fiebre tifoidea o la poliomelitis; también propagar infecciones bacterianas como la salmonella.
Si entran en contacto con alimentos que van a ser consumidos, las cucarachas alemanas se transforman en vectores de contaminación y pueden generar intoxicaciones. Además, tanto estos insectos como sus heces pueden provocar reacciones alérgicas en niños pequeños o en grupos de riesgo como los asmáticos.
Consejos prácticos para evitar que las cucarachas alemanas te invadan
La primera medida para combatir a la cucaracha alemana empieza por ti. Debes eliminar todos los restos de comida y alimentos que estén al descubierto. Los cubos de basura son otro de sus lugares predilectos. Cierra bien las bolsas y saca la basura con regularidad para que no se propaguen.
Además, al sellar huecos o grietas evitarás que utilicen estos lugares para esconderse o acceder a tu vivienda. La utilización de aerosoles o cebos puede ser efectiva a corto plazo, pero si detectas una población considerable de estos animales ya te avisamos: no será suficiente.
En estos casos lo mejor es recurrir a expertos en el control de plagas como CONTROL DE PLAGAS FUENTES para realizar una desinfección más profunda. Escríbenos para que estudiemos la situación y podamos indicarte cuál es la mejor manera de olvidarte de estos insectos para siempre.
¡Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos!