Plagas que atacan la madera
Hay una gran variedad de plagas que atacan la madera. Según en qué zona de la casa estén, sus consecuencias pueden ser más o menos graves. Por ejemplo, una infestación en la estructura de la vivienda podría hacer que una parte se derrumbe, por lo que es necesario actuar con celeridad.
Es verdad que, en la mayoría de los casos, no suponen un problema tan serio. No obstante, es necesario abordarlo cuanto antes para evitar complicaciones mayores. Toma nota de los tipos de infestaciones más comunes que se propagan en la madera:
Termitas
Es la plaga de la madera que más problemas causa, la más común y la más destructora. Viven en termiteros bajo el suelo y salen cada día en busca de madera, llegando a construir galerías de un centenar de metros.
En general, no acostumbran a dejar una huella exterior evidente que alerte de su presencia, ya que no se observan orificios de salida. Por eso, es posible que te enteres de una infestación cuando la madera se rompa por falta de solidez.
Carcoma
Su territorio favorito se encuentra en las maderas secas de ambientes cálidos, por lo que los muebles del interior de las viviendas son un hábitat ideal. A diferencia de la termita, la carcoma sí deja un rastro visible formado por restos de un serrín llamado ‘quera’.
Polillas
Atacan la madera con un importante contenido en almidón, como el roble, el castaño, el nogal, el fresno o el olmo. No es difícil localizarlas, pues sus larvas dejan un rastro de serrín. La buena noticia es que no hay que preocuparse por daños estructurales.
Prevenir es mejor que curar
El mejor remedio para evitar plagas en la madera, insistimos, es la prevención. Un correcto mantenimiento de la estructura, las ventanas, las puertas o los muebles quizás resulte pesado, pero es muy efectivo. Si es demasiado tarde para ello, lo ideal es contactar con un servicio especializado.
En CONTROL DE PLAGAS FUENTES tenemos más de 30 años de experiencia en el sector y podemos ayudarte con este problema. No dudes en contactarnos cuando lo necesites. Dejarlo en nuestras manos es la mejor forma para poder olvidarte de una plaga por completo.